En un acto de acompañamiento, amor y construcción comunitaria, el Colegio Santa Elena se destacó por su participación activa en una campaña solidaria destinada a brindar ayuda a las personas afectadas por los incendios en la región de Valparaíso. Esta iniciativa no solo reflejó la perseverancia y la alegría de la comunidad educativa, sino también el liderazgo de mujeres comprometidas con la espiritualidad de Santa Elena. La campaña, que se llevó a cabo en el contexto de un profundo sentido comunitario, se enfocó en apoyar específicamente a la comunidad del Olivar, demostrando así la confianza y el respeto hacia aquellos que se vieron afectados por la tragedia. Siete familias, junto con profesoras del equipo de Pastoral y la encargada de Convivencia del ciclo básico, se unieron el pasado sábado 6 de abril para ofrecer su ayuda. Daniella Cazangas, Coordinadora de Comunidad y Sello, expresa “Quiero agradecer a todos los apoderados y cursos del colegio por la gran respuesta a esta campaña solidaria. Cómo colegio no queríamos reunir donaciones y dejarlas en un centro de acopio, sino ir al lugar, entregar las donaciones personalmente y así, además de conocer la realidad que están viviendo las personas de El Olivar, nuestro deseo es el de generar vínculos y dar continuidad a esta campaña. Las familias que pudieron ir a dejar todo lo reunido, han quedado muy motivadas y deseosas de transmitir al resto de la comunidad educativa, todo lo vivido para sensibilizar y así lograr comprometer a los demás para continuar ayudando. Ahora nuestro desafío es reunir 100 frazadas de dos plazas para entregar algo de calorcito a las personas del lugar, ahora que comienza el frío.”
El acto de solidaridad no solo se limitó a la entrega de útiles escolares, cajas organizadoras, fogones y alimentos no perecibles, sino que también se extendió a la preocupación por los animales afectados, mostrando una comprensión integral de las necesidades de la comunidad en momentos de dificultad.
Gracias a la participación activa y comprometida de toda la comunidad del Colegio Santa Elena, esta campaña no solo representó una acción significativa, sino también un proceso de aprendizaje y crecimiento, donde el valor del amor al prójimo se manifestó en su plenitud. En tiempos de adversidad, la espiritualidad de Santa Elena iluminó el camino hacia la solidaridad y la esperanza, recordándonos la importancia de forjar valores que fortalezcan el tejido social y nos conduzcan hacia un futuro más humano y compasivo.